Monday, April 18, 2011

Los tamaños del Amor

Zacatecas, Zac a 18 de Abril del 2011


Es una delicia el libro, claro, lo leí cuando la pasión había arrebatado los ímpetus de mi corazón, y me arrojaba como marioneta al mundo gritando: comienza otra vez. Con mi espíritu desparpajado, loco de amor, hecho trizas por saber que había perdido y para siempre las noches que me mostraron sin tregua la razón más vital de la existencia.

Si, sé que por esas noches de entrega yo entraba en trance disfrutando las mieles del placer y que llegaba al día siguiente todo desvelado, pero eso si, puntual a mis clases, para enseñar a mis alumnos que el pensamiento recursivo le otorga al raciocinio un placer tan intenso como el de esas madrugadas.

Y entonces en uno de esos muchos días en que mi corazón desolado me pedía que llorara sin tregua, que calmara mi alma que moría de tristeza después de que ella me había dicho que no volvería a ver sus ojos negros y todo esto cuando yo estaba drogado de serotonina, norepinefrina, oxcitocina, dopamina, adrenalina y noradrenalina. Y luchando por no morir en esa sobredosis mediante el ejercicio, escalando en horas extrañas a las montañas más cercanas de mi ciudad para llorar en sus cúspides y mediante fuertes dosis de serotonina del tchocolatl, brebaje Azteca sustraído de las semillas tostadas y trituradas del árbol sagrado Cacahuaquaitl.

Fue entonces que me encontré el libro de Victor Roura: "Los tamaños del Amor", un libro tan intenso que solo con los títulos de sus relatos es posible sumergirse de manera filosófica y poética a los extravíos del amor.

Y para los sanos escépticos de este mundo lleno de misterios, les mando una pequeña prueba, tomen en cuenta que solo es la punta del Iceberg.

1. ¿Es solo el amor una armadura para protegerse del propio desamparo?
2. ¿Es el estado amoroso donde algunos sujetos razonables adivinan de pronto que la locura esta ahí?
3. Lo mejor es no intentar comprender el amor, cuyo carácter inexorable e inesperado parece regido más bien por leyes mágicas que por leyes racionales.
4. No hay amor que pueda resistir los efectos de una reflexión sana.
5. A las mujeres solo les gustan los celos en los hombres de quienes ellas podrían estar celosas.
6. ¿Qué hace un celoso con sus celos cuando está realmente enamorado?
7. Despertar todos los días juntos en la misma cama es mortal.
8. Entregarse de modo inconsciente, la peor manera de amar.


-jm